24.11.11

Rajoy Presidente

La Marina Baixa registra espectaculares resultados para el PP


Con 186 escaños el Partido Popular cosechó el pasado Domingo 20 de Noviembre su mayor victoria desde su fundación. Por su parte el PSOE, con 110 escaños, cayó hasta su mínimo histórico y se situa en cifras mas que críticas para la subsistencia del actual modelo del Partido Socialista. Posiblemente se hará necesario un cambio importante en las directrices de los socialistas, que ven como su modelo ha quedado fuera de la realidad social actual. La sangría ha sido extraordinaria, y el voto socialista ha emigrado situandose en las más diversas formaciones políticas. Por su parte el Partido Popular vive un momento de euforia contenida por la gravedad de la situación que no se le escapa a sus lideres: España se encuentra al borde del abismo y hay que asumir la mayor responsabilidad que podría encomendarsele a un partido en la reciente historia de nuestro pais. La tónica en La Marina Baixa ha sido la del resto de la Comunidad Valenciana y España: el Partido Popular no solo gana, sino que lo hace contundentemente en absolutamente todos los municipios. Algunos, como es el caso de Callosa d´en Sarrià, en cifras impresionantes (el 66,10% para los populares), superando el historico liderato en voto popular de La Nucía (59,60% en estas elecciones). Benidorm (56,90%), Alfaz del Pí (55,80%), Altea (52,30%), Polop (53,30%) o Villajoyosa (57,20%) son ejemplos de los resultados, todos ellos a favor del Partido Popular.
La sangría sin paliativos del Partido Socialista ha permitido a otras formaciones recibir parte de ese voto, lo que justifica que Izquierda Unida remonte los pesimos resultados de las ultimas elecciones generales o que Copromís recoja una buena cantidad de voto de la izquierda socialista. No obstante ninguno de ellos logra sus objetivos en Alicante de obtener un diputado. En el caso de Compromis, se revela que el número de voto fidelizado está muy por debajo del obtenido en las recientes elecciones municipales o incluso autonómicas. Compromis se conforma más bien como refugio ocasional del voto descontento, pero la izquierda nacionalista no acaba de cuajar como alternativa.

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