Artículo de opinión. El Socialismo real o la política de la Bono Loto

Por  Dario Samaniego,  Delegado de Intereconomía

Yo tambien quiero ser como Bono, porque Bono lo es todo. Es socialista, pero tambien creyente. Es del partido de Paulino Iglesias, pero tambien cree en la política de mercado. Es Presidente a servicio del Congreso, pero el Congreso tambien esta a su servicio. Y es tan escrupuloso en la legalidad de sus actos, que se permite hacerse ver con el juez Garzón, otrora adalid de grandes causas, hoy malogrado representante de la judicatura española de televisión y prensa amarilla. Yo tambien quiero ser Bono y llevar las siglas de socialista, de obrero y de español. De socialista porque su gran patrimonio esta repartido, eso si, entre su familia. Obrero porque por sus “obras” la envidia corroe a media España,  ya sean inmobiliarias o empresariales. De Español, porque como Bono pocos los hay tan patriotas.

Y es que viendo a Bono, veo al Partido Socialista, a esa parte del Partido Socialista menos creyente en la doctrina y mas abierta a renunciar a la ortodoxia marxista, la que esta entre Pinto y Valdemoro, la que se deja seducir por el “capitalismo imperialista” que tanto denosta la progresía vulgar y anticuada. Si no que se lo pregunten a su compañero de abrazos, guiños y “achuches”, Baltasar, que cuando hace falta, porque no, va y le pide al banquero que le deje la pasta, que con el tiempo ya habrá forma de devolverla.  De Bono dicen algunos que aún no se sabe todo. Quizas se lo reserva para sus memorias, esas de las que ya ha cobrado un pico aunque no sabemos si venderá muchos ejemplares porque, con lo transparente que es Bono ¿acaso queda algo que contar?. Yo quiero ser Bono...