Por Javier García Barrera, CORC, Párroco
En estas últimas semanas hemos despedido de este mundo a varios miembros de nuestra comunidad parroquial, es una experiencia difícil de comprender si no se tiene fe en la voluntad de Dios, que actúa providente y con misericordia.
Quiero expresar el sentir de la comunidad creyente de Callosa d’ en Sarriá con respecto a dos hermanas nuestras que se han destacado en la feligresía por su fe, generosidad, paciencia y buen testimonio cristiano.
El día 20 de febrero a las 16:00 hrs, desde su casa en la Plaza España, a la edad de 89 años, el Señor llamaba a Paquita Pérez Lapera, quien nació el 2 de agosto de 1920, hija de José y Remedios. Siempre atenta y sonriente para todos los que le saludaban, generosa en la atención a la misión de la Iglesia y muchas horas dedicadas a la oración, arreglo y decoro de la Casa de Dios.
Mujer discreta y paciente en sus sufrimientos y acciones, compañera en todo momento de su hermana María, desde sus años mozos en la peluquería. Descansa Paquita en la paz del Señor junto a tu hermano Vicente y a vuestros queridos Padres.
En un día lluvioso y frío, como diría alguno, porque hasta el cielo lloraba, despedimos a Pepita Ronda, quien nació el 18 de julio de 1940, hija de Javier y María, esposa diligente y atenta, madre generosa, cariñosa y paciente, buena abuela y excelente amiga.
Hasta hace 22 días sonreía y trabajaba como todas las mujeres de Callosa y colaboraba cuando sus actividades se lo permitían con la limpieza del templo de la Patrona a quien elevaba sus oraciones y súplicas por su familia y seres queridos.
La vida continuará en la eternidad y por ello rezamos al Señor para que les conceda el Descanso eterno y a nosotros la paz.
En estas últimas semanas hemos despedido de este mundo a varios miembros de nuestra comunidad parroquial, es una experiencia difícil de comprender si no se tiene fe en la voluntad de Dios, que actúa providente y con misericordia.
Quiero expresar el sentir de la comunidad creyente de Callosa d’ en Sarriá con respecto a dos hermanas nuestras que se han destacado en la feligresía por su fe, generosidad, paciencia y buen testimonio cristiano.
El día 20 de febrero a las 16:00 hrs, desde su casa en la Plaza España, a la edad de 89 años, el Señor llamaba a Paquita Pérez Lapera, quien nació el 2 de agosto de 1920, hija de José y Remedios. Siempre atenta y sonriente para todos los que le saludaban, generosa en la atención a la misión de la Iglesia y muchas horas dedicadas a la oración, arreglo y decoro de la Casa de Dios.
Mujer discreta y paciente en sus sufrimientos y acciones, compañera en todo momento de su hermana María, desde sus años mozos en la peluquería. Descansa Paquita en la paz del Señor junto a tu hermano Vicente y a vuestros queridos Padres.
En un día lluvioso y frío, como diría alguno, porque hasta el cielo lloraba, despedimos a Pepita Ronda, quien nació el 18 de julio de 1940, hija de Javier y María, esposa diligente y atenta, madre generosa, cariñosa y paciente, buena abuela y excelente amiga.
Hasta hace 22 días sonreía y trabajaba como todas las mujeres de Callosa y colaboraba cuando sus actividades se lo permitían con la limpieza del templo de la Patrona a quien elevaba sus oraciones y súplicas por su familia y seres queridos.
La vida continuará en la eternidad y por ello rezamos al Señor para que les conceda el Descanso eterno y a nosotros la paz.
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